A Lucha Reyes
recuerdo su grito ronco laminado
extraña voz extraño color de piel
los músculos eran aún gelatina movible
difusa
como el fuego de antorchas
¡un vals pequeña!
un escupitajo azul de abundantes bronquios
en televisión los vestidos hacen bellas transformaciones
pero el callejón quedó inmune como una vacuna intestinal
inamovible en la piel esa marionetilla antialérgica
mírala
-sabe cantar-
su cuero negro azul marino bajo los reflectores
¡una cicatriz demente en la foto!
vamos Lucha
(Luchita)
la cancha espera
el aguardiente añejo en un solo sorbo ácido para los amigos
la carroña en orden y numeración sobre la platea curva
un contrato seguramente y salir de aquí
a las Bermudas a las Bahamas a donde sea salir de aquí
¿quién lleva y trae los paquetes?
El foro muerto empuña como un botón maduro la oscuridad
la iglesia de violáceo sale al encuentro con sus alas
de palma yace
inservible en la alacena Nada que beber
ni sonreír Esta vez no
ahora el micrófono es mío el púrpura descomunal de la orilla
soledosa me excita encajona mis pensamientos
algunas ratas rodean El Buque y el color lava el suelo sucio
sobre el asfalto
flores de felpa
¿y el agua que no existió?
- y el agua que no existió nunca
Entonces sólo era la felicidad y el rey negro de las cucharas
con un tenedor brillante en las axilas redondas de la noche
un par de ajos gigantes
aplausos sobre la pleamar endurecida de la pared Un corazón
de jesús ebrio sobre la puerta descansa del sueño
tu padremadre el tío Miguel formas impresionistas como el amor
Hay que ir al Karamanduka para verte sonreír de ese modo
¡Qué jarana!
sudando bailando gozando de ese modo
Hoy quiero darte la peluca de rafia dorada del maniquí celeste
Que te prometí
los rizos piel de tigre
antes del sueño.
                                                                     [De Abajo, sobre el cielo]

                                                                     [Roxana Crisóloga,  (Lima, Perú, 1966-)]


 

| entrada | Llibre del Tigre | sèrieAlfa | varia | Berliner Mauer |